La auditoría del 100% de la urnas de votación de las presidenciales venezolanas, anunciada el jueves por el Consejo Nacional Electoral (CNE) tras recibir una impugnación del opositor Henrique Capriles, consiste en contrastar la mayor parte de los comprobantes físicos del sufragio con los votos registrados vía electrónica, reseña Afp.
Los resultados del CNE, que dieron al oficialista Nicolás Maduro la victoria con 50,8% de los votos frente a un 49% que obtuvo Capriles, se basan exclusivamente en la transmisión electrónica, pero existe además un respaldo físico de cada sufragio.
En el sistema automatizado de votación que se utiliza en Venezuela, el elector vota en una máquina que guarda en su memoria cada sufragio para transmitirlos al cierre del proceso a la sala de totalización del CNE, que además imprime un resguardo físico del voto que cada elector deposita en una caja.
Lo normal es que, cuando no hay ninguna impugnación o dudas sobre los resultados, solo se audite el 54% de las poco más de 39.000 cajas que contienen los comprobantes durante una auditoría inmediatamente posterior a la votación, que es abierta al público y en la que las papeletas son contrastadas con las actas emitidas por cada máquina.
Ahora, el CNE extenderá la auditoría al universo del 46% restante de las cajas tras recibir una impugnación de Capriles a este proceso.
La ampliación de la auditoría al 100% de las urnas no implica, sin embargo, la apertura de todas las cajas restantes y el conteo voto a voto que pedía la oposición, pues de ese 46% será seleccionada una “muestra” de aproximadamente dos tercios de las cajas para contrastar su contenido con las respectivas actas de escrutinio.
El comienzo del proceso de auditoría ampliada, que se dará en tres ciclos consecutivos de 10 días cada uno, será anunciado la semana próxima por el CNE.
El ente electoral explicó ya, sin embargo, que prevé revisar “un promedio de 400 cajas de resguardo por día” en cada uno de esos ciclos, en presencia de técnicos designados por la oposición y el oficialismo.
Aunque Capriles había exigido públicamente el recuento del 100% de los votos físicos y su contraste con las actas y los listados de votantes, el opositor consideró un triunfo la ampliación de la auditoría.
“Nosotros consideramos que en esas 12.000 cajas (que finalmente se abrirán) están los problemas, perfectamente nosotros podemos demostrarle al país la verdad”, dijo Capriles al reaccionar al anuncio del CNE.
El gobierno, por su parte, aún no se pronuncia sobre la decisión, que no altera ni afecta para nada la toma de posesión de Maduro este viernes.
AFP