Lo información constituye un dato totalmente nuevo alrededor de la convalecencia del expresidente Chávez en la isla de Cuba que se manejó con el mayor secretismo, ya que anteriormente ningún vocero o familiar había informado sobre un “derrame”.
Durante las primeras alocuciones del Ministro de Comunicación Ernesto Villegas, informó la presencia de un “…sangramiento que requirió de medidas correctivas que pemitieron su oportuno control”.
