El presidente saliente de la Asamblea Nacional Popular china (ANP), Wu Bangguo, instó hoy a que se ponga en marcha “lo antes posible” una ley de ciberseguridad, cuando el país asiático y EEUU todavía se recuperan de su reciente encontronazo por las acusaciones mutuas de espionaje informático.
EFE
Así lo destacó hoy Wu durante su último discurso como presidente del máximo órgano legislativo del país, pronunciado en el Gran Palacio del Pueblo de Pekín frente a los casi 3.000 diputados de la cámara y los próximos líderes chinos, Xi Jinping y Li Keqiang.
“Ha habido fuertes y sucesivas llamadas por parte de la sociedad para mejorar la protección de la gestión de internet y luchar contra los crímenes cibernéticos”, resaltó el político.
El pasado febrero, la consultora Mandiant publicó un informe que apuntaba a una unidad del Ejército chino en Shanghái como origen de gran parte de los ciberataques contra EE.UU.
China negó las acusaciones y respondió asegurando que sus páginas web sufrieron en 2012 una media de 144.000 ciberataques cada mes, un 62,9 por ciento de ellos procedentes, afirmaron, de Estados Unidos.
En el plano doméstico, Wu defendió el endurecimiento del control de internet durante el último año, que concluyó con la aprobación en diciembre de una ley por la cual los ciudadanos pasaban a estar obligados a registrarse con sus nombres reales para tener acceso a la red y a otros servicios de telecomunicaciones.
“En los años recientes, el rápido desarrollo tecnológico ha sido fundamental para la estimulación de la economía y el desarrollo social, pero también ha hecho elevar el riesgo de serios problemas”, dijo Wu en referencia a unas normativas que han sido fuertemente criticadas por considerarse un nuevo ejemplo de censura.
Pero el hasta ahora “número dos” del Partido Comunista chino (PCCh) volvió a defender que, en el caso del registro obligatorio, de lo que se trata es de “proteger la delicada información electrónica de los ciudadanos”.