El aparato que despegó desde Los Roques a Maiquetía el viernes pasado en la mañana con cuatro pasajeros y dos tripulantes desapareció luego de una breve comunicación con la torre de control del archipiélago. En ese momento, volaba a 10 millas náuticas al sur del punto de despegue.
JAVIER IGNACIO MAYORCA / SANDRA GUERRERO / LUIS LÓPEZ /El Nacional
Hasta ayer en la tarde no se había producido el avistamiento de restos de la aeronave bimotor o de sus ocupantes: Vittorio Missoni y su esposa Maurizia Castiglioni, Elda Calvenzi y Guida Foresti, además del piloto Germán Marchant y el copiloto Juan Fernández.
Las labores se dificultaron debido a una fuerte lluvia en los alrededores del archipiélago y el mar picado. Una comisión del Instituto Nacional de Aeronáutica Civil y del Ministerio Público viajó a Gran Roque para continuar con el rastreo.
“Hasta ahora, no tenemos nada más”, afirmó un integrante de este grupo. En las instalaciones del Servicio Aeronáutico de Rescate quedaron familiares de algunos ocupantes y de los tripulantes.
Descartan secuestro. El especialista en búsqueda y salvamento, y portavoz de la Organización Rescate Humboldt, Enrique Martín, descartó que la avioneta bimotor fuese objeto de un apoderamiento o interferencia ilícita.
“Lo que sucedió no obedece al modus operandi de un secuestro de aeronave. En estos delitos ocurren cosas totalmente distintas”, señaló.
Martín indicó que la avioneta fabricada por Britten Norman pudo tener una falla súbita en medio de condiciones meteorológicas adversas que ocasionó un siniestro.
La búsqueda de los restos debería comenzar en las coordenadas donde se registró el último reporte a torre de control. Los restos de la nave y sus ocupantes serían arrastrados por la corriente en sentido este-oeste, a una velocidad promedio de 1,2 millas náuticas por hora. De allí que podrían llegar a las costas de Carabobo o Falcón a partir de hoy al mediodía.
Los registros de la ORH indican que éste sería el décimocuarto siniestro de aeronaves que se dirigen o vienen de Los Roques. El más grave ocurrió en enero de 2008 con un Let 410 de Transaven, cuyos restos aún no han sido encontrados. No obstante, en la mayoría de estos episodios los pasajeros han sobrevivido.
“Profundo agradecimiento”
Desde Italia, una hermana del empresario Vittorio Missoni, Angela Missoni, emitió un comunicado para expresar su agradecimiento hacia las autoridades de su país y de Venezuela por el esfuerzo demostrado en la búsqueda.
“Estamos en contacto directo con el Ministerio de Relaciones Exteriores Italiano y la policía federal de Roma para reportes de la desaparición de mi hermano y coordinar todas las informaciones y ofertas de ayuda que recibimos de todas partes del mundo”, informó.
Indicó que su hermano Luca Missoni se incorporó a las labores de búsqueda en Venezuela: “Estamos en contacto con las autoridades venezolanas y la Unidad de Crisis de la embajada italiana”.
Expresó que la familia sigue teniendo fe en que los ocupantes de la aeronave se encuentren vivos: “Tenemos un profundo agradecimiento por el apoyo (…). No vamos a desistir”.
Negligencia
Manuel Alcalá, padre de Patricia Alcalá y suegro de Alexander Nierman, ocupantes del avión YV2081 que cayó al mar el 4 de enero de 2008 con 14 pasajeros frente a Los Roques, dijo que no es posible que por negligencia se repitan accidentes e incidentes con aeronaves en los terminales del país. Alcalá se refirió al caso de la avioneta siglas YV2615, que desapareció el viernes pasado a escasos minutos de despegar del Gran Roque.
Señaló que a finales de este mes llegará a Puerto España, Trinidad, el buque contratado por los gobiernos de Venezuela e Italia para reiniciar el rastreo de los restos del avión de Transaven. La embarcación saldrá el 18 de este mes del puerto Furthon, en Louisiana.
Un piloto venezolano indicó que existe una providencia administrativa que prohíbe con carácter permanente que las aeronaves de pistón –igual a la que cayó al mar el viernes cerca de Los Roques– hagan operaciones aéreas desde y hacia el aeropuerto internacional Simón Bolívar de Maiquetía.
Capitán preparaba retiro
A sus 72 años de edad el capitán Germán Marchán, piloto de la avioneta identificada con las siglas YV 2615, había expresado desde el año pasado que se retiraría de la aviación. “Siempre me comentaba que aspiraba a retirarse pronto. Me dijo el año pasado que se iría a descansar a su haciendita. Me extrañó hace tres meses cuando lo vi en el aeropuerto y me dijo que sólo haría unos viajecitos más”, relató Alí Tovar, mecánico de aviación.
Uno de sus amigos más cercanos, el capitán Pablo Monroy, dijo: “Siempre fue un excelente amigo y un gran profesional”.
Alejandro Tovar es el mecánico de la avioneta desaparecida por lo que se descarta que la aeronave presentara fallas mecánicas o de combustible. “Estaba en buenas condiciones”, aseguró.
Se conoció que Lucas Missoni estuvo hospedado desde el sábado en un hotel de Playa Grande, en Vargas. Ayer se trasladaría a Los Roques, pero el vuelo no se habría efectuado debido a la lluvia.
En el terminal auxiliar de la empresa de la avioneta Transaereo 5074 C.A no hubo actividades ayer.